Wednesday, August 22, 2007

ya no te quiero, agosto



El verano se acaba y no seré yo quien lo impida. El gris renace de la mediocridad del punto medio, del divorcio del blanco y negro, y empieza a quedar fuera de lugar en este final de agosto decadente, demasiado fabuloso. Este octavo mes pesimista e infecundo aborta la voluntad de la metamorfosis que oxigena lo que más me gusta, el concepto de lo nuevo.
Estamos en una agonía racional que es preciso agotar: el final del verano. Adiós por fin a las rayas marineras, al dulce olor a coco de cada uno de los miles de bronceadores baratos, bye a los bikinis y a quien inventó el triquini. Fuera el mediodía odioso de desnacidas pinceladas amarillas. Se acabó el penetrante y renovador aroma a cloro…
El otoño serpentea entre las lágrimas de cocodrilo de los domingueros y veraneantes tardíos de esta quincena cansina, y a pesar de las plañideras, las hojas volverán a caer, sin poder desafiar una vez más la ostentosa y anticuada, ley de la gravedad. Los escaparates se teñirán de típicas paletas de mokas y chocolates, de azules azafata y las bufandas rodearán eróticas mi cuello como los mejores brazos, llenos de besos furtivos, los mejores, siempre húmedos.
Vuelta a casa, los jardines quedan desiertos, se abandonan las miradas al mar, y hundir los dedos en la arena, la ciudad se resiente con la pérdida de sus mayores adeptos en estos meses secos, los adoquines necesitan humedecerse con las bellas gotas de agua de las primeras lluvias, las primeras humedades, las manchas de hierba y mis adoradas setas.
Mi enfermedad invernal se acerca, se vierte en café caliente, cine, jerseys, libros de literatura y marchas forzadas a mi feliz vida inventada. Inundada en lluvia, te saludo: bienvenido, mi amor, mi querido y húmedo invierno. Siempre tuya,
Majo

7 comments:

Anonymous said...

Yo con un nublado inglés me conformaba. Sí es verdad que ya estoy saturado de mirar tantas estrellas a la cara...

Yo apuesto por los niños en fila camino de la escuela. Ellos puede que lleguen antes que el frío y la lluvia.

Tic-tac, tic-tac, tic-tac ...

Carpe diem, seize the day

maherencia

Anonymous said...

Entiendo que mi radicalidad vuelve a relucir pero prefiero mil inviernos antes que un verano.

Anonymous said...

Me apunto a tu invierno, cuando quieras a cualquier puento de tu lista de ventos, del cine al libro, del paseo, al paraguas, pero añade aunque sea tan solo un fin de semana de surf bajo la lluvia.

un beso

Anonymous said...

No lo entiendo: ¿Qué pasará por la cabeza de las personas que odian la Navidad?, supongo que algo parecido a lo de aquellas que despiden a agosto con un "ya no te quiero".-Cruel Majo, fria dama deciochesca-

Un ser tan simple como yo brilla como las luces del pino más sobrecargado de adornos manufacturados en China en pleno Diciembre y disfruta como un bebé con manguitos en su primer baño en agua con cloro.
Soy así de simple:
Me gusta el verano y la alegria de un agosto atestado de turistas que pasean por mis calles; me gusta lucir palmito decadente-pero mio-en plazas y parques cerca de terrazas;me gusta que se me pongan los mofletes rojos del sol; me gusta mi toalla de walt disney y mi estilo Donald al pegarme un chapuzón; me gusta ver a las señoras sentadas con sus mecedoras preguntándose entre murmullos "¿la niña ésta, se casa o no se casa"; me gusta que mi novio no madrugue y se le peguen las sábanas a mi lado; me gusta la sandia y el melón; me gusta oler los bronceadores de coco; me gusta el color blanco sobre mi piel dorada; me gusta la sonrisa del heladero; me gustan los helados de turrón y stracciatella con sirope de chocolate; me gusta el agua fresquita de la ducha y el after sun; me gusta que mi pelo churruscado se seque a su aire; me gusta el silencio del barrio en mi hora y media de siesta; me gusta ver a mi madre en bikini; me gusta desfilar por el borde de la piscina metiendo barriga y apretando gluteos sabiendo que mi hermano se mea de risa; me gusta besar a mi novio cuando anochece en la playa y que me tape con la toalla; me gusta chuparme los dedos cuando como sardinas en un chiringuito playero; me gusta que me entierren en la arena para luego levantarme corriendo simulando a "LA MASA";me gusta escuchar música y escribirle postales a mis amigas mientras miro las olas; me gusta madrugar (en plan dominguero) para ir a la playa con mi gente y parar a desayunar como todo el mundo en La Hiedra; me gusta la minifalda, no usar sujetador y ponerme siempre camisetas de tirantes...Y aunque me gustan las bufandas, la Navidad, la estufa y el oir llover tras los cristales no puedo darle un adios tan frio a mi querido agosto.
Déjale dar sus últimos coletazos tranquilo amiga Majo, que si tú ya no lo quieres, yo siempre le amaré en silencio hasta su regreso.

*Y del agosto en Brasil ya ni hablamos!!!

Majo Caracuel said...

eres encantadora, ers como volver a leer a mi adorado peter pan, por tí, vuelvo a empezar un agosto!

Anonymous said...

¡Amén, Deke! Por unos momentos me has hecho amar el verano y olvidarme de mi inseparable otoño-invierno.
¡Enhorabuena!

Anonymous said...

Por cierto, pensando en algunas cosillas durante el almuerzo me ha venido a la mente una cuestión en relación con A&P y los seguidores de éste: ¿no habéis pensando alguna vez en reuniros en torno a una asociación? ¿O acaso ya existe? O, por el contrario, ni os lo habéis planteado por las dificultades que ello plantea. Mª José ha logrado aglutinar a gente muy preocupado e interesantísima intelectualmente en este blog y podrías tener un foro cultural de participación activo y, por qué no, un medio para expresar vuestra calidad literaria. No es difícil hacer una asociación y lo digo por experiencia. Dejo la cuestión en el aire para ver vuestros comentarios y pensamientos.